Ultra-short income ETFs: Construcción activa de la cartera para optimizar el riesgo de crédito y de liquidez
Consideramos que nuestros ETF Ultra-Short Income son una solución ideal para maximizar la rentabilidad y minimizar el riesgo. Nuestro enfoque de gestión activa combina una visión macroeconómica top-down con un marco de estrategias de inversión basado en una plataforma de análisis exhaustivo bottom-up especializada en los distintos sectores de renta fija. El resultado es una cartera que trata constantemente de optimizar el perfil de riesgo y rentabilidad en función de los distintos entornos de mercado. Al tratarse de un ETF de gestión activa, esta misma estrategia activa que llevamos gestionando durante 15 años puede ser utilizada por más clientes y con un mayor nivel de flexibilidad —sin renunciar a ninguna de sus características de liquidez o calidad—.
Gestión del riesgo de crédito aplicando un enfoque ascendente
A fin de conseguir una rentabilidad mayor que los fondos tradicionales del mercado monetario, las estrategias de duración ultra corta invierten en una cesta de valores más diversificada para añadir riesgo de forma prudente —y, por consiguiente, la gestión del riesgo de crédito es una parte esencial de nuestro proceso—. Nuestros ETF Ultra-Short Income aprovechan las capacidades crediticias de todo nuestro equipo de investment grade compuesto por más de 70 analistas de crédito, especializados por industrias y sectores, y distribuidos por todo el mundo; esto ofrece a nuestros gestores de cartera un mejor conocimiento de las empresas que compramos. Los analistas asignan a cada emisor individual su propia calificación interna, que representa una aportación importante para las decisiones de construcción de la cartera.
A continuación, el equipo de liquidez global utiliza la «matriz crediticia» —su marco conservador para gestionar el riesgo de crédito—. La calificación interna determina si se aprueba la compra del valor para nuestros ETF, mientras que la matriz crediticia asigna un plazo máximo y un tamaño de posición máximo por emisor. A pesar de que la duración máxima permitida para la cartera es de un año, el vencimiento final máximo para cada título individual que compone los ETF Ultra-Short Income es de cinco años. En consonancia con el enfoque de la matriz crediticia, en el caso de los valores con calificaciones internas más bajas normalmente adoptamos posiciones más pequeñas con vencimientos escalonados (con separaciones temporales uniformes).
Los analistas de crédito y los gestores de cartera supervisan de forma constante estos límites y las calificaciones crediticias. Nuestras reuniones mensuales de gobierno corporativo sacan partido de los insights adicionales de nuestros equipos de distribución, riesgo, jurídico y de cumplimiento normativo.
Posicionamiento táctico aplicando un enfoque top down
Al mismo tiempo que nuestro proceso botom-up identifica los valores más idóneos para nuestros ETF Ultra-Short Income, nuestros gestores de cartera elaboran una estrategia de inversión basada en importantes temas del mercado, que ayuda a conformar el posicionamiento en duración, duración del diferencial y asignación sectorial, entre otros.
Los principales profesionales de la inversión de nuestra estrategia de duración ultracorta se reúnen cada mes para debatir nuestras perspectivas fundamentales para la economía —centrándose en factores como el crecimiento del PIB, el desempleo y los tipos de interés— e identifican los principales temas de inversión en los que se basan nuestras decisiones para la cartera. El equipo de gestión de carteras utiliza después el análisis de escenarios para valorar el rendimiento del valor y de la cartera en diferentes entornos, lo que ayuda a determinar el posicionamiento óptimo en la curva de tipos y en los diferentes sectores.
Este elemento top-down incorporado a nuestro proceso de construcción de la cartera puede resultar particularmente útil para garantizar unos niveles correctos de riesgo y liquidez en entornos de mercado muy cambiantes.
Construcción activa de la cartera en la práctica
Nuestras actuaciones a comienzos de 2020 ponen de manifiesto lo activos que podemos llegar a ser para gestionar la volatilidad y la liquidez. Recortamos el riesgo tan pronto como vimos que la preocupación por la COVID-19 comenzaba a aumentar en febrero de 2020: redujimos los valores con calificación BBB y el crédito titulizado, y también vendimos bonos de tipo flotante y las posiciones en determinados sectores, como los valores relacionados con la energía. Preveíamos un aumento de la actividad y una recuperación de liquidez por parte de los clientes; por consiguiente, tratamos de minimizar los riesgos a través de una cuidadosa gestión de los vencimientos, es decir aumentando nuestro nivel de liquidez, acumulando en torno a un 30% de liquidez a menos de un mes durante los meses de la crisis.
Nuestro equipo de crédito interno fue un valioso recurso y colaboramos estrechamente con ellos para revisar de forma crítica todas las empresas incluidas en nuestra lista de candidatas de compra, a la luz del nuevo y complicado entorno de mercado, en el que los sectores en los que operan muchas de estas empresas se paralizaron por completo. Como resultado de nuestro análisis pudimos gestionar convenientemente el riesgo y hacer frente en efectivo —y no en especie— a todas las solicitudes de reembolso durante la crisis.
Manteniendo una estricta vigilancia del crédito, durante el segundo y el tercer trimestre de 2020 aumentamos tácticamente el riesgo hasta unos niveles atractivos, conservando al mismo tiempo el nivel de liquidez. Hemos seguido manteniendo parte de esta liquidez natural a pesar de la normalización de los mercados. Al mantener este «dry powder» nos aseguramos de estar preparados para comprar nuevas emisiones atractivas y añadir posiciones cruzadas en divisas, con las que tenemos la oportunidad de generar una rentabilidad adicional gracias a las divisas.
En nuestra condición de gestor activo, disponemos de la flexibilidad necesaria para comprar los valores que queremos y en el momento en el que queremos, sin vernos obligados a mantener posiciones presentes en el índice de referencia que podrían conllevar riesgos no deseados o un lastre de la rentabilidad.
Misma estrategia de duración ultracorta en un ETF de gestión activa
Todas las ventajas de nuestra estrategia de gestión activa de duración ultracorta por valor de 98.000 millones de dólares —desde las perspectivas de inversión top-down hasta la selección de valores bottom-up— se aplican a nuestros ETF Ultra-Short Income. Nuestros ETF se benefician asimismo del acceso de toda nuestra plataforma de liquidez global a la liquidez subyacente del mercado, lo que resulta particularmente importante para un ETF de liquidez. Por último, el propio vehículo del ETF añade un grado adicional de liquidez, en su condición de instrumento de inversión fácil de negociar y a disposición de múltiples tipos de inversores.